29 Ene Aparición del Reloj Mecánico
Historia del reloj mecánico – Del Volante al Foliot
En un segundo tiempo, apareció el regulador de «foliot» que permitía graduar manualmente la velocidad del reloj. Este nuevo invento permitió fabricar relojes mucho más precisos (como los que aparecen en estas imágenes).
El reloj mecánico no se inventó con fines domésticos, fueron en principio relojes de torre, con un mecanismo movilizado con pesas.
Se supone que estos primeros relojes debieron aparecer hacia el año 1300. Tan solo algunos reyes y prelados tuvieron un reloj por su propio placer o para desatender sus rezos.
Con la invención del resorte, los relojes se hicieron realmente portátiles y pudieron entrar en los conventos y monasterios. La regla del Cister ordena al lego que tenga dispuesto el «horologium» para despertar oportunamente a los monjes a maitines. La vida se rige en el monasterio a toques de campana.
Los primeros relojes fueron relojes de hierro y relojes de linterna. Constituían un bien muy preciado para las familias que podían poseerlos. Eran relojes sin caja y era el propio movimiento lo que constituía el elemento decorativo.